Armazón, estructura o esqueleto del sofá
El esqueleto interno de un sofá puede estar fabricado de varios materiales. Habitualmente de madera maciza, de pino sobre todo pero, también, puede incluir una combinación de madera maciza y tableros de partículas de distintas calidades.
Algunos sofás incluyen armazones metálicos, hierro, acero o aluminio, que aportan gran resistencia y durabilidad, pero también un peso mayor. La forma del esqueleto de cada sofá es diferente según el diseño del mismo y los distintos elementos que incluya.
Las patas del sofá
Las patas del sofá también determinan su estilo y funcionalidad. Lo habitual es que estén fabricadas de madera con distintas opciones de acabados.
Son determinantes a la hora de marcar un estilo de diseño.
Pueden estar incorporadas de distintas formas al armazón del sofá según sea éste de madera o metálico, fijas o atornilladas. En mucho hogares se utilizan actualmente robots aspiradores.
En este caso, la altura de las patas debe facilitar el uso de estos robots sin dificultad.
Mecanismos y bastidores
Muchos sofás actuales incorporan asientos deslizantes, sistemas relax, cabezales reclinables o arcones bajo los asientos. Estos elementos necesitan mecanismos especiales y bastidores que deben acoplarse al esqueleto del sofá, lo que complica su estructura, diseño y mantenimiento.
No siempre estas funcionalidades aumentan la comodidad del sofá. Depende de cómo estén fabricados los bastidores y mecanismos instalados. Es necesario informarse de los materiales utilizados y probar suficientemente la comodidad del sofá.